NUESTRA BECARIA
ANA MARÍA MANZORRO LAARAJ
Extraordinario recorrido, aprovechamiento de su tiempo y de todas las oportunidades que se le ponían delante. Ahora trata de afianzar su futuro mediante una oposición en la que le deseamos mucha suerte.
Mi nombre es Ana María Manzorro Laaraj y tuve el honor de ser becada por la Asociación de Mujeres Universitarias de Marbella (AMUM) en el verano del curso 2019/2020. Sin duda, este reconocimiento fue un gran impulso para dar comienzo a mi carrera en el mundo del Derecho, una vocación que tenía clara desde muy pequeña.
Recuerdo que, al inicio de la carrera, asistí a una charla impartida por el decano de mi facultad. De todas sus palabras, hubo una frase que me marcó profundamente: “Puedes dejar que la universidad pase por ti, o puedes pasar tú por ella”. Desde entonces, esa reflexión me ha guiado en cada paso: decidí vivir mi etapa universitaria con actitud activa, participativa y con afán de crecimiento constante. Con esa mentalidad, aproveché todas las oportunidades que la universidad me brindaba.
Una de las primeras metas que me propuse fue desarrollar mis habilidades en oratoria, esenciales en el ejercicio jurídico. Así, me uní a la asociación de debate ADUMA, con la que fui semifinalista del torneo interno de mi universidad y tuve el privilegio de representar a mi facultad en competiciones nacionales como el Torneo Tres Culturas. Gracias a esa experiencia entendí lo fundamental que es la palabra hablada en el ámbito jurídico. Esta última reflexión me motivo a postularme al MUA Talent Summer Camp de ESADE (Law School) Durante esa experiencia, totalmente financiada por esta, tuve la oportunidad de litigar ante magistrados en activo en Barcelona, desarrollar habilidades jurídicas reales (legal skills) y compartir vivencias con estudiantes de toda España con intereses comunes. Una vivencia transformadora que no hizo sino reforzar mi pasión por el Derecho.
Otro de mis objetivos era no terminar la carrera sin haber vivido la experiencia práctica en un despacho profesional. Por ello, en tercero de carrera decidí aprovechar la oportunidad que me brindó la vida de incorporarme a Garrigues, una de las firmas más prestigiosas de España, especializada en servicios legales y fiscales con proyección internacional. Tras superar un exigente proceso de selección compuesto por varias pruebas, obtuve una plaza de prácticas en el área de Derecho Mercantil, estancia formativa que con el tiempo se acabaría prolongando y que me permitiría seguir aprendiendo y trabajando de la mano de profesionales de primer nivel. Durante este tiempo, tuve la oportunidad de participar en asuntos complejos relacionados con grandes empresas y multinacionales, lo que contribuyó de manera decisiva a consolidar mi formación y perspectiva profesional.
En mi último año de carrera, me correspondía realizar una tarea de carácter más investigativo, el Trabajo Final de Grado. Decidí dedicarlo a un tema que me apasiona profundamente: LegalTech e Inteligencia Artificial. Fue un reto exigente, marcado por la escasa bibliografía disponible en aquel momento y la necesidad de construir el proyecto prácticamente desde cero. Sin embargo, esa misma sensación de estar explorando un terreno aún poco transitado fue lo que más me motivó. Yo sentía que abría camino en un ámbito con un enorme potencial de futuro. Esta investigación no solo me permitió fusionar mi vocación jurídica con mi interés por la tecnología, sino que también reafirmó mi deseo de seguir profundizando en esta línea de estudio.
Actualmente me encuentro inmersa en el apasionante y exigente mundo de la oposición. Sin embargo, tengo muy claro que, una vez obtenga mi plaza, ese no será el final del camino. Mi vocación por el Derecho va más allá por lo que me encantaría después de obtener plaza cursar un máster y realizar una tesis doctoral que intentaré compaginar con mi trabajo. Son mis próximos dos grandes objetivos.
Tras cuatro intensos y gratificantes años de carrera, agradezco cada día la oportunidad de estudiar lo que realmente me apasiona. El Derecho es, sin duda, el motor que impulsa mi desarrollo personal y profesional. Y todo comenzó, en gran parte, gracias al apoyo, la confianza que AMUM depositó en mí.